Bloomsbury Football empezó con una conversación. Bueno, fue algo más que eso, pero una conversación dio el pistoletazo de salida.
Rebobinemos hasta 2018.
Nuestro Director General, Charlie, estaba terminando sus estudios universitarios, durante los cuales había estado viajando de ida y vuelta a Londres todos los fines de semana para entrenar a su equipo de fútbol base.
A Charlie siempre le ha gustado el fútbol. Como seguidor del Arsenal de toda la vida, recuerda el primer partido al que fue. Fue en el antiguo estadio del Arsenal, durante la temporada de imbatibilidad del equipo. El tamaño del estadio, las luces, los sonidos, el público... le engancharon.
Charlie jugó al fútbol durante toda su infancia, y fue cuando empezó a entrenar vio realmente elel poder del fútbolll tiene para ayudar a los jóvenes.
Mientras entrenaba en la universidad, Charlie empezó a detectar ciertos problemas en el fútbol base. Las instalaciones en las que jugaban los jóvenes a menudo no eran lo suficientemente buenas: los campos eran irregulares y se encharcaban en invierno. Las sesiones a veces estaban desorganizadas y no siempre se podía acceder a material de calidad.
Further, evidence of the high price point of sessions was clear – too many young people were getting priced off the pitch, and football sessions were reflecting the wider social division in London.
Todo ello con el telón de fondo de los retos sociales a los que se enfrentan los jóvenes: el aumento del aislamiento social, la obesidad, las enfermedades mentales y los índices de delincuencia en la capital.
Charlie had experienced and seen first-hand how football can support young people to become happier and healthier, learn life skills and have a strong community. He believed this was something that should be accessible to everyone, regardless of their background or where they live.
Así que volviendo a esa conversación...
In 2018, Charlie was revising for his university finals in a café in London. He bumped into Dan and Mark, parents of players on his team. They began talking about these problems and how football was becoming an increasingly inaccessible sport.
LA PRIMERA SESIÓN
Un par de semanas después, Charlie dirigió la primera sesión de Bloomsbury Football en un campo de Camden. Asistieron cuatro niños, dos de los cuales jugaron gratis. Este es el modelo y el espíritu con el que hemos crecido: nunca se rechazará a ningún joven en una sesión de Bloomsbury Football.
¿POR QUÉ BLOOMSBURY?
¿Por qué "Bloomsbury"? Estamos orgullosos de llamarnos Bloomsbury Football porque estamos vinculados al rico patrimonio cultural y educativo de esta emblemática zona de Londres. Queríamos marcar la zona en la que fuimos fundados y mantenernos fieles a nuestra misión: seguir arraigados en nuestra comunidad. Sin embargo, no nos limitamos a esta zona de Londres: nuestro objetivo es convertirnos en la mayor organización de fútbol base de Londres, garantizando que ninguna familia se quede sin jugar.
DÓNDE ESTAMOS AHORA
We’ve grown a lot since that first session on a pitch in Camden.
Our team now has over 35 full-time members of staff and more than 50 coaches who run sessions around London each day. We are proud to engage over 5,000 young people each week through a range of programmes and have ambitious plans to scale up this impact.